Hoy me puse ropa sofisticada, ropa de maestra de profesora, los anteojitos dan la nota de color, la pollera muy larga de un tono aburrido. No pude dormir, me levanté a las seis de la mañana pensando y pensando lo peor. Cuando salí de casa pensé lo mejor. Perder todo está tan cerca de ganar todo que a veces me pierdo. No entiendo. No entiendo cómo pueden ser las cosas de esta manera. El jugo de naranja en caja tiene un olor químico muy feo. Me lo tomo igual. Los consejos de esa amiga eran muy ambiguos pero los tomé igual, le hice caso, me pareció bien
Ahora todo mal
Ahora todo bien
El resaltador naranja
El resaltador amarillo
Estudiar
Las sillas rojas
Las sillas amarillas
lunes, 5 de julio de 2010
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